Los
sueños en muchos casos podrían ayudarnos a resolver
problemas personales y del trabajo. En lo personal he experimentado
muchas veces esta afirmación. No obstante, aprender a buscar
soluciones a través de los sueños no es nada
fácil. Se requiere de técnicas especiales y voluntad para
conseguir del sueño una buena comunicación del
conciente al subconsciente y poder recordarla.
Lo más aconsejable es acostarnos con la
pregunta y repetirla varias veces como por ejemplo: ¿debería hacer ese viaje?,
¿me convendrá firmar ese contrato?, ¿será buena idea trabajar con ese
individuo?, ¿valdrá la pena una relación con esa persona?, ¿cuál será la mejor
manera de presentar el proyecto? etc. Podría sorprender gratamente la forma en
que comienzan a llegar las imágenes proponiendo alternativas o viviendo por
breves instante las soluciones a nuestros problemas como si atuviéramos mirando
una pantalla de televisión o cine.
Una
vez que perfeccionemos la técnica hasta podríamos guiar los sueños conocidos
como “sueños lúcidos” en el que imaginamos volar y visitar distintos lugares del
mundo, reunirnos con nuestros seres queridos ya fallecidos, hablar con cualquier
personaje famoso del mundo artístico, intelectual o deportivo pues en los sueños la mente no
tiene límites y podría ser una aventura en extremo interesante.