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SALUD
INTEGRAL
UN NUEVO PARADIGMA
PARA UN NUEVO MUNDO
Por Marcos J. Díaz Almeida – Gran Canaria, Islas Canarias
marcosdial80@hotmail.es
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Desde
hace ya algún tiempo, los descubrimientos en física
cuántica han revolucionado el mundo de la ciencia. Esto, unido a
los conocimientos ancestrales heredados de antiguas civilizaciones
está dando un vuelco al rumbo de la historia, incluidos los
conceptos de salud o medicina.
Hasta ahora se nos había planteado una realidad a la que
ceñirnos y con la que lidiar con mejores o peores resultados.
En lo relativo a la salud, bienestar, equilibrio o como quiera
llamarse, los avances están siendo sorprendentes. El auge de las
nuevas medicinas llamadas cuánticas está dando como
resultado un nuevo planteamiento del ser y de la conciencia
que va mas allá de los patrones establecidos al menos en el
último siglo.
Al caso, quisiera nombrar una en concreto de la cual soy practicante, al menos conscientemente, desde hace dos años. El Método Yuen.
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Su creador es el Dr. Kam Yuen,
un maestro Shaolin de la generación 35º que ha desarrollado esta
técnica tras una vida dedicada al estudio de las artes marciales,
además de ser ingeniero aeroespacial y doctor en quiropráxia entre
otras disciplinas. |
Este, como otros procedimientos de medicina cuántica está
basado en sentir, más que en pensar. Sentir a nivel
telepático la respuesta que está en el interior de cada
persona a nivel de cuerpo, mente y espíritu. Una vez
desarrollada esta habilidad, desde un estado neutral y vacío
(estado de no-mente), cualquiera está capacitado para
hacer correcciones energéticas y mejorar su calidad de vida.
Se llaman correcciones energéticas a los cambios que se producen
al encontrar las verdaderas causas que originan el problema o
disfunción. Estas correcciones, se establecen a
través del pensamiento y en solo unos segundos, cambiando
así la polaridad del efecto debilitador.
El sentir cada vez mas y mejor, lleva a una mayor percepción de qué o cual es la debilidad, y con la percepción mas afinada por la práctica, se consigue intuición, que a la postre es la mejor herramienta para cualquier ser humano.
Quizás lo mas innovador de esta práctica sea su visión del cuerpo humano como “el mayor ordenador jamás creado”,
el cual, a símil de una computadora común, está
formado por chips que obedecen a un sistema binario de conectado
o desconectado. De esta manera se podría decir que la salud o el
éxito están programados por miles de interruptores
diminutos que están en nuestro interior y que están
conectados o desconectados para esto o aquello. Encontrando la
debilidad para cada caso se podría asegurar una
programación adecuada mediante correcciones energéticas,
cambiando el estado debilitador en la causa por el de fortalecedor,
haciendo que se restablezca el flujo de energía.
Como en muchas culturas antiguas el conocer las preguntas, no las
respuestas, permite encontrar las soluciones. Con trasmitir la pregunta
correcta simplemente con el pensamiento es posible obtener la respuesta
acertada sobre qué, dónde y cómo deben ser
aplicadas las correcciones. Se trata de sentir la respuesta que
está dentro de ti o de otros.
Nuestros cuerpos tienen un programa de curación natural, la
homeostasis, cuyo objetivo es mantener en equilibrio de forma constante
el medio interno. Se puede decir entonces que este método, no
trata dolencias, más bien lo que hace es identificar y corregir
las causas de las mismas devolviendo al cuerpo esta condición
intrínseca de funcionamiento.
Para recapitular, quisiera añadir que esta tecnología
siempre ha estado aquí, con nosotros, oculta tras un velo de
condicionamientos para el público en general, mas muchas
tradiciones antiguas siempre han promulgado las grandes capacidades y
potenciales de la experiencia humana durante milenios.
Esta técnica, como otras similares, nos acercan a esos
paradigmas tan anhelados por muchos para hacernos responsables,
dueños y señores de nuestra propia maestría como
seres humanos creadores de nuestra realidad a un nivel cada vez
más consciente.
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enero de 2014
Rev Dig UNIVERSO Nueva
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